bueno douzo....
Recuerdos…es lo único que ahora tengo de ti… si tan solo
hubiera sido menos cobarde, si te hubiera dicho todo lo que siento por ti sé
que al menos te hubieras ido feliz, pero no lo hice creí que estaríamos juntos
para siempre, jamás imagine que esto terminaría, jamás creí que ese día te
perdería…
Recuerdas el día que nos conocimos, yo jamás lo olvidare… ese día
en el que me encontraba llorando en un parque mientras la lluvia caía sobre mí, ese día en que creía que moriría, que la vida
no tenía sentido, ese día en el que tu sonrisa me salvo. No sé de donde llegaste pero al levantar la vista
solo puede verte a ti, extendiendo tu mano hacia mi sonriendo…por eso siempre creí
que eras como un ángel, bueno en tu caso un hada que llego a mi solo para
ayudarme a salir adelante.
Terminaste con toda la oscuridad que había en mi vida,
llenaste todo de luz me regresaste las
ganas de vivir, hiciste que volviera a enamorarme, cuando creí que no lo volvería
hacer…cada día que pasábamos juntos te amaba un poco más, cada mañana al
despertar y verte a mi lado me hacía tan
feliz… y aun así jamás te lo pude decir, ¿por qué? Porque hasta ahora me doy
cuenta de lo mucho que te necesitaba, ahora que ya no estas y que no podras
regresar.
¿Recuerdas como discutíamos?, la manera en la que peleábamos
por cualquier cosa… tu forma infantil en la que te molestabas y dejabas de
hablarme, esperando a que yo fuera y te contentara, pero mi orgullo nunca me
dejo hacerlo, así que siempre eras tú el que terminaba pidiendo disculpas, ahora entiendo lo difícil que debió ser para
ti, siempre ser tú el que daba todo para que esto funcionara, no sabes lo que
daría para que esto hubiera sido diferente,
pero sé que es imposible regresar el tiempo...sé que es muy tarde para
arrepentirme…
Siempre tenías una sonrisa que darme, esa sonrisa que solo me
mostrabas a mí, tan cálida tan llena de amor, y sabía que sin importar lo
cansado o que no te encontraras bien siempre podría verla.
Esa vez que delante de mi te desvaneciste no supe que hacer, como pude te lleve al
hospital, días después supimos de tu enfermedad, tenías un tumor en el cerebro y
era imposible extraerlo, no quería creerlo en cualquier momento podía perderte,
sentía que moriría, pero tú a cambio
solo sonreías y decías que todo estaría bien que no me preocupara. Pasaron los
días tuviste que transferirte al hospital, el doctor dijo que era lo mejor, cada vez te encontrabas peor, los dolores de
cabeza eran cada vez más fuertes, y yo no podía hacer nada más que solo estar a
tu lado.
Recuerdo esas últimas palabras que me dijiste –prométeme que
aun que yo no este serás feliz, que volverás a enamorarte y seguirás con tu
vida- en ese momento me reusaba a pensar que te perdería así que después de
escucharte decir eso solo me moleste, pensé que te estabas dando por vencido y
me fui…dejándote solo… de nuevo solo
pensaba en mí. Después de un rato
regrese al hospital, aun pensaba en la manera de disculparme por haber actuado de
esa manera, al entrar a tu habitación vi que el doctor y varias enfermeras se
encontraban a tu alrededor, el doctor
volteo hacia mí y me dijo lo que menos esperaba escuchar… sentí que las
fuerzas me abandonaron caí al piso y comencé a llorar, esos últimos
momentos los pasaste solo y es por lo que más me culpo, por no
haber estado contigo. ¿Que se supone que hare sin ti?
A pesar de que ha pasado un año desde que te fuiste, no habido
un momento en que haya dejado de pensar en ti, todo el tiempo estas en mi
mente, cada cosa que veo me recuerda a ti, al llegar a casa lo único que espero
es encontrarte pero no es así…me dirijo a lo que alguna vez fue nuestra
habitación es tan difícil estar aquí…extraño sentirte a mi lado, el olor de tu
cuerpo, esas noches en las que te entregabas a mí sobre esta misma cama sin
importarte nada más, tus besos sobre mi piel, como tus manos recorrían mi
cuerpo haciéndome perder totalmente la razón, la manera en la que nuestros
cuerpos se hacían uno…cuantas veces escuche que me decías “te amo” mientras te
hacia mío pero yo nunca te lo pude decir, quizá fue por miedo a salir herido
nuevamente, pero de lo que no me di cuenta fue de que lo único que hacía era
herirte a ti. Ahora sé que decirlo ya no sirve de nada…
-Te extraño y te necesito tat-chan- es lo único que puedo
decir.
Pero hoy por fin he tomado una decisión, me dirigí a aquel
lugar en donde nos conocimos mire hacia al cielo queriendo encontrarte la nieve
no deja de caer, no se si es verdad que cuando mueres vas al cielo pero en
estos momentos lo único que quiero es verte en el, recuerdo las veces que nos
quedábamos juntos en este mismo lugar mirando las estrellas en silencio, tu solo
te recargabas en mi pecho mientras yo te abrazaba, en ese momento parecía que
el tiempo se detenía…solo existíamos tu y yo,
no necesitaba nada más para ser feliz…pero ahora mirar al cielo y ver
esas estrellas es tan doloroso el no tenerte junto a mí no lo soporto necesito
sentirte cerca, esas últimas palabras que dijiste aun hacen eco en mi mente; ¿ser
feliz? Como podría serlo si no te tengo a mi lado, si no puedo ver esa sonrisa
que me brindabas día a día… ¿enamorarme otra vez? Imposible porque en mi corazón solo existes
tú y nadie más podrá estar… ¿seguir con mi vida?, ¿Para qué?... si lo más
preciado que tenía ya no está conmigo, después de todo tu te convertiste en mi
vida, discúlpame por no poder cumplir lo que me pediste, pero no puedo, me es
imposible. Por eso ahora solo te pido que me esperes mi querida hada, prometo
que pronto estaremos juntos y esta vez será para siempre, solo un poco más y
volveremos a encontrarnos, después de esto nada nos separara… a partir de hoy solo existiremos tu y yo como siempre debió
ser; esta vez ya no habrá más dolor…
No hay comentarios:
Publicar un comentario